
01 Ago Consejos de nuestra especialista en medicina estética: que nunca te falte el protector solar
Con el verano tomamos conciencia de lo expuestos que estamos al sol pero nuestra especialista en medicina estética de PB Clinical te explicará por qué el protector solar no debe faltar nunca en nuestra rutina diaria de belleza. Incluso cuando el día está nublado. Pero antes de entrar en detalles, ¿sabes exactamente qué es el factor de protección solar? Pues bien, el FPS es el índice que indica la capacidad protectora que tienen la crema solar frente a los efectos nocivos de la radiación ultravioleta, la cual puede estar provocada por los rayos UVA o por los rayos UVB. ¿Y de qué efectos nocivos hablamos? Desde manchas y quemaduras hasta efectos irreversibles que pueden aumentar el riesgo de cáncer de piel.
Otra pregunta habitual sobre el protector solar suele ser la de cómo escoger el más idóneo para cada tipo de piel. Ante esta duda, la respuesta es que el nivel de FPS dependerá del tipo de piel (los fototipos), del lugar en el que se encuentre la persona y la época del año. Porque tan importante es aplicarse FPS antes de tumbarse en la arena de la playa como incluir la dosis correcta en una rutina de belleza diaria. Sí, como lees. Es muy importante interiorizar que hay que protegerse del sol siempre, independientemente de si estamos en bikini exponiendo todo nuestro cuerpo o si estamos completamente vestidas, paseando por la ciudad.
El protector solar debe ser un must have en la rutina de belleza diaria y diurna. Así, una vez te apliques tu crema hidratante por las mañanas, debes utilizar una crema de protección solar antes o después del maquillaje –hay diferentes formatos y acabados-. Este paso debe ser respetado, incluso, en los días más nublados porque la radiación ultravioleta (UV) traspasa la capa de ozono, provocando los mismos efectos nocivos sobre la piel. Así que, ya sabes , aplicar diariamente, y correctamente, un protector solar repercutirá de manera muy positiva en tu piel y en tu rostro. A continuación recogemos los principales beneficios destacados por nuestra especialista en medicina estética:
Evitar quemaduras
Sin duda es la primera imagen que nos viene a la mente en cuanto hablamos de protector solar: la típica espalda, piernas o rostro rojos, quemado por los rayos del sol. Hay que evitar a toda costa que tu piel sufra una quemadura de este tipo no solo por el dolor inmediato, sino por las consecuencias que puede provocar a largo plazo.
Potente antiaging
Es uno de los grandes beneficios del uso diario de protector solar. Incluirlo en nuestra rutina de belleza cada mañana nos ayudará a prevenir el fotoenvejecimiento de la piel. Si nos preocupamos de seguir una rutina de noche en la que incluimos cremas y contornos con las que prevenir la aparición de arrugas además de los tratamientos estéticos, ¿por qué no aliarnos con el protector? Su barrera será fundamental para evitar la aparición de las líneas de expresión.
Evitar la aparición de manchas
Con el paso del tiempo, una de nuestras principales preocupaciones son las manchas que aparecen en el rostro, pero ¿y si te decimos que evitarlo está en tus manos? ¿Cómo? Reiteramos una vez más la respuesta: incluyendo en tu rutina de belleza el protector solar más adecuado a tu tipo de piel y al lugar en el que vayas a estar.
Prevenir enfermedades
Como bien apuntaba nuestra especialista en medicina estética, las quemaduras provocadas por el sol pueden tener consecuencias a largo plazo, y sin duda la más alarmante es la aparición de cáncer de piel por un uso incorrecto, o por la ausencia, del protector frente a los rayos del sol. Usando FPS también minimizarás el riesgo de sufrir otras enfermedades de la piel como alergias o intolerancias consecuencia de una exposición solar.
Sin duda alguna, la prevención es la mejor solución para lucir una piel sana, cuidada y bonita. Como bien indica la especialista en medicina estética de PB Clinical, no se trata únicamente de una cuestión de belleza, sino, también, es una cuestión de salud. Recuerda incluir el protector solar en tu día a día y, especialmente, cuando tu piel se exponga totalmente, como cuando disfrutas de un día en la playa o en la piscina. El FSP será la mejor barrera con la que protegerte. Pero si no tienes claro qué factor necesitas y con que asiduidad debes aplicarlo en función de tu tipo de piel, no lo dudes y visítanos. Estaremos encantados de analizar tu caso concreto y darte las pautas necesarias para cuidar, hoy y siempre, tu piel.